Yasmin Benoit: desafiando los estereotipos en torno a la asexualidad
«En la escuela, era conocida como la chica negra gótica y extraña obsesionada con el heavy metal. También me gusta mucho la literatura rusa del siglo XIX», dice Yasmin Benoit. Sin embargo, en la actualidad Benoit —quien vive en el Reino Unido— es más conocida como una activista que redefine y celebra la asexualidad, una orientación sexual en la que se siente poca o ninguna atracción sexual hacia ninguna persona, independientemente de su género. Benoit también es arromántica, lo que significa que no experimenta sentimientos románticos.
Aunque se dio cuenta de que era asexual a una edad temprana, Benoit —que trabaja como modelo— realmente no «salió del clóset» hasta que estuvo en la universidad. «No era algo que compartía abiertamente porque la gente realmente no me creía», afirma. Al darse cuenta de que había un gran vacío en la representación de las personas asexuales, especialmente en línea, Benoit recurrió al activismo. «No puedo quejarme de que no haya representación de personas negras asexuales si tengo una plataforma e intencionalmente no digo nada al respecto», sostiene.
Su cruzada para desafiar los estereotipos en torno a la asexualidad y el arromanticismo ha llevado a Benoit a colaborar con Stonewall, escribir para publicaciones como Vogue y dar una charla en la Universidad de Oxford. Su campaña en las redes sociales This Is What Asexual Looks Like no solo muestra que no existe un «look» asexual, sino que también le da una identidad a una comunidad a menudo ignorada en las conversaciones sobre la homosexualidad y la sexualidad.
Aún así, cuando publica sus propias fotos en línea, las reacciones destacan un concepto erróneo común sobre las personas ace (otro término en inglés para referirse a las personas asexuales): que no puedes ser sexy si no eres sexual. «La gente dirá: “bueno, si es asexual, ¿por qué se viste así? ¿Por qué trabaja como modelo? Debería volverse poco atractiva desde el punto de vista sexual”», dice Benoit. En muchos sentidos, crecer de forma «rara» con su estilo único ha ayudado a Benoit a lidiar con el abuso que recibe a diario. «Toda mi vida he tenido gente que me ha dicho que me vista diferente y, en realidad, nunca lo he hecho. En cierta medida, lo que hago ahora es una continuación de eso».
El abuso queerfóbico que señala Benoit, combinado con la idea sexista de que una mujer que usa lencería debe querer tener relaciones sexuales (generalmente con un hombre), se ve agravado por el racismo vinculado a una larga historia de sobresexualización y fetichización de las mujeres negras. «Podría estar usando jeans y una camiseta, y aun así sufriría abusos», afirma. «Dirán: “bueno, sus labios, su rostro y su cuerpo son intrínsecamente seductores”. A lo que yo respondo: ¿entonces estás diciendo que encuentras mis rasgos naturales de mujer negra intrínsecamente tentadores?»
Esta fobia a las personas asexuales tiene varias dimensiones y no se limita a la estética. Benoit revela que también la han llamado «enferma mental», una respuesta común a la asexualidad (hasta 2013 se consideraba un trastorno psicológico). También le han dicho que debe tener algún defecto de personalidad, que tuvo alguna «mala experiencia sexual» o que fue abusada. «A menudo me llaman psicópata y narcisista», dice. Aún así, aunque su apariencia sigue provocando odio, a Benoit lo que le importa son las personas a las que ayuda a través de su activismo. «Muchas personas me han contactado sobre mi trabajo y me han dicho que están muy felices con el tipo de representación que transmito. Para mí, eso es lo que verdaderamente importa».
Molly Lipson es escritora independiente y activista de justicia social. Su trabajo ha sido publicado en The New York Times, Rolling Stone y Vice.